De cuando Yoani y su esposo fueron brutalmente desnudados en un bosque de La Habana

Jorge Ángel Hernández

El descubrimiento de que la chica gay de Damasco era un bloguero estadounidense que estudia en Escocia, Reino Unido, despertó el interés de muchos curiosos en el mundo y, además, la lógica reacción de activistas sirios que se hallan dentro y fuera del país. Entre otras lindezas de la suplantación informativa, este estudiante ha concedido entrevistas que servieron para valorar la situación y, sobre todo, para generar estados y patrones de opinión. El de Tom MacMaster no es, sin embargo, un caso aislado.

Jelena Lecic es suplantada por Tom Mac Master como la bloguera lesbiana Amin Arraf

La suplantación es un viejo método que la Guerra Fría llevó a niveles muy intensos de especialización. Primero se genera un estado de opinión y, luego, se construye un hecho capaz de servir de botón de muestra para reafirmar aquello preanunciado por el estado de opinión. Las suplantaciones de estos tiempos, que han suplantado el declarado fin de la Guerra Fría con su continuidad cínica y factual, responden a la necesidad de justificar las intervenciones militares del polo imperialista, una vez que se demuestra, por esas mismas construcciones, la fase crítica irreversible del país o la región que se quiere invadir.

Así se hizo con las revueltas en el Tíbet, en 2008, para cuya divulgación se usaron fotos de militares chinos que se habían desempeñado como extras en papeles de monjes en una película. Mostrados como si fueran soldados que se disfrazaban para reprimir a los seguidores del Dalai Lama, sus imágenes recorrieron el mundo. Y ni siquiera se trataba de imágenes simultáneas, por casualidad contiguas, sino de fotos de archivo que fueron recolocadas en las notas de agencias. También suplantaron con imágenes de la policía Nepalí lo que se decía estaba haciendo la policía china.

BBC News como suplantadora reincidente

Durante el golpe de Estado al presidente venezolano Hugo Chávez, las televisoras del mundo usaron las imágenes de la policía golpista para mostrar la represión que se llevaba a cabo contra los manifestantes, supuestamente en contra del presidente electo y legítimo. La realidad era exactamente lo contrario y, esa vez, duró poco el estatuto construccionista puesto que el propio pueblo repuso al presidente.

Y a este método de guerra sucia y propaganda negra acudió pocos días atrás el diario argentino Infobae, cuando reportó la muerte por golpiza del cubano Soto García, en Santa Clara, ilustrando la noticia con fotos de la policía hondureña. Una joya de la credibilidad que deja claro hasta qué punto se hace impune el uso de la suplantación en su más burdo estado de superchería. La verdad es que cualquiera ha visto a milagreros ambulantes que ponen más cuidado al proponer brebajes y conjuros.

Infobae ruboriza a los milagreros en sus técnicas de suplantación y propaganda negra

Yoani Sánchez, la cubana famosa por su blog Generación Y, también se inventó su paliza en noviembre de 2009, aunque iba a caer de inmediato en descrédito ante la prensa que, acaso confiada en que no sería tan elemental el montaje, o incluso que el hecho era en efecto cierto, fue buscando pruebas visuales del suceso. Yoani estaba tan convencida de que, tras haber construido un estado de opinión no necesitaría someterse a pruebas, que no tuvo otra idea mejor que transmitir por su móvil una muy mala farsa. Como se trata de un mecanismo que se pone en marcha sobre la base de que vendrá un apoyo informativo que no permitirá matices ni aclaraciones, estas “astucias” terminan pasando como broma y no como delito, como corresponde. Tal vez siguiendo nuevos consejos, la bloguera cubana ha decidido que es mejor suplantar una condición de artista de la plástica y ha asumido el papel, no sin la ayuda de un prestigioso crítico y curador cubano que no había sido sometido antes a pasar gato por liebre en las exposiciones auspiciadas por el Ministerio de Cultura de Cuba. Independientemente de que la obra de arte lava mejor que nada cualquier tipo de ingreso, suplantar la condición de artista es un adelanto que predice más atendibles construcciones mediáticas, sobre todo para quienes consideran que arte es cualquier cosa y ven en el trabajo del artista un instrumento para el uso espurio del poder.

Al parecer, aun esos párrafos de redacción elemental con que pergeña GeneraciónY, no se hacen tan fáciles de sostener como las fotos, para las que basta con apretar el botoncito. Así lo ha hecho desde el 1º de junio mediante el Festival Photo-España 2011 y gracias a la exposición Face Contact del Teatro Fernán Gómez y el Centro de Arte de Madrid. Con su inclusión en este grupo de artistas, no solo ha suplantando la condición elemental del arte, sino además el lugar de sus siempre denunciados perseguidores con el de personas que se asombran cuando su lente las enfoca.

Por eso el arbitrario derecho de parodia posmoderna me permite publicar esta foto, muestra evidente de la brutalidad del régimen, cuyos seguidores de la Policía política no han tenido escrúpulos en dejarlos en cueros en medio de un bosque de La Habana.

La brutal Policía política habanera se marcha llevándose como botín las ropas de la perseguida pareja